Saltar al contenido

Bonaigua Gran Fondo 2019

Volvemos a una nueva edición de la cicloturista por los pirineos con el puerto de la Bonaigua como protagonista y el que da nombre a la cita: Bonaigua Gran Fondo

Y digo volvemos porque ya estuvimos el año pasado y nos quedamos con ganas de volver a disfrutar de tan bonitas vistas.

En esta edición, con nuestro estado de forma actual y sabiendo lo duro que se acaba haciendo, nos decantamos por la Medio Fondo, “sólo” 88km y 2200m de desnivel (apenas 26km y 400m de desnivel menos que la GF) pero si aún lo ves negro, había una tercera opción, la Mini Fondo, que básicamente es coronar el puerto y bajar.

BONAIGUA Gran Fondo
.

Lo bueno de pasar el fin de semana en Vielha es que puedes recoger el dorsal tranquilamente el sábado y así no te levantas con prisas el domingo. Se respiraba un ambiente muy relajado sabiendo que no había clasificación que disputar (es lo bueno que tiene el cicloturismo y las “Gran Fondo”) aunque no faltaron corredores que viéndolos ya sabías que no le llegamos ni a la marca de los calcetines.

Puntuales y cumpliendo el horario arrancamos neutralizados por la calle principal de Vielha hasta salir del pueblo donde se acelera un poco más el ritmo. 

Por delante teníamos el puerto de La Bonaigua por la vertiente de la Val d’Aran, 21km continuos salvando un desnivel de 1100m y con una pendiente media del 4,8%. 

Para seros sinceros nunca he creído en esos porcentajes de puertos ya que es muy relativo. Vale que la media sea esa pero cuando vas por medio puerto y miras el gps el porcentaje no baja del 6,5-7%. No es una salvajada pero imaginad eso, constante, durante más de diez kilómetros. Al final petas.

BONAIGUA Gran Fondo
.

Menos mal que compensa con las preciosas vistas del valle…

Este año, contando que no vamos tan rodados como el pasado, nos lo tomamos con algo más de calma sabiendo lo que nos esperaba después y también porque con el frío con el que amaneció me costaba algo más carburar. 

Esto se traduce con 4’30” más respecto al tiempo del año pasado. 

Coronamos junto a una compañera de Ride For Her que nos cazó los últimos kilómetros. Un proyecto solidario de ámbito global que tiene como objetivo mejorar la calidad de vida en mujeres diagnosticadas con cáncer de mama a través del ciclismo

Paramos en el avituallamiento unos segundos para comer y beber cuanto entrara, y continuamos. Sí amigos, ahora toca bajar!!!
En curvas lentas soy un tocho, demasiado conservador, será que no llevo neumáticos demasiado buenos, pastillas de freno duras que no dan seguridad al frenar, o que con mi 1,83m veo las hostias desde más arriba, por todo eso siempre me pasa lo mismo, mi compañero Oliver coge distancia. 

Tras las queridas curvas de herradura vendrían una eternas rectas donde por mi mayor peso e ir bien acoplado marqué un pico de 79km/h. De locos. En la vida he llegado yo a esas marcas…

Y sin darnos cuentas llegamos al desvío de los dos recorridos, los de la Gran Fondo darían un pequeño rodeo extra coronando el Alt de Jou mientras que nosotros, la Medio Fondo, seguíamos directos hacia Esterri D’Àneu donde encontraríamos otro avituallamiento. 

Sinceramente, el tramo de carretera desde que dejamos la principal hasta que llegamos a dicho pueblo es de lo mejor del recorrido.

Paramos a comer y beber a pesar de que el cuerpo viene “fresco” después de los veintitantos kilómetros de bajada y encaramos la nueva subida al puerto, ahora por la vertiente Pallars, 21,5km salvando un desnivel de 1120m y una pendiente media del 5,2%. Pero como antes me río yo de ese último dato. Cuando veías ese cinco en la pantalla del gps te parecía que ibas en llano. 

Nada mas salir de Esterri camino a Isabarre ya nos encontramos unas buenas pendientes para ir abriendo boca, al pasar por el embalse de Borén una pequeña tregua de rodar tranquilo antes de encontrarnos un kilómetro donde la pendiente no bajada del 9%. 

BONAIGUA Gran Fondo

De vuelta a la carretera principal y hacia arriba. 

Las fuerzas van algo justas, el sol empieza a apretar y Oliver lo sufre. Yo en cambio voy mejor con calor que con frío y me encuentro bien, pedaleando de pie para liberar algo de presión al trasero. Va pasando kilómetro a kilómetro y llegamos a las herraduras.

A priori puedes pensar que ya lo tienes hecho porque bajando llegas a este tramo enseguida pero aún te queda un mundo. Ahora se cambian las tornas, Oliver es un puro diesel que va mejor conforme van pasando los kilómetros mientras que yo soy cada vez más gasolina que pega el petardazo pero se le acaba el combustible antes. Os imagináis a quién se le hizo bola el último tramo del puerto, verdad?

A pesar de todo y de coronar tan fundido consigo rebajar mi tiempo en 11 minutos clavados, según el tramo de Strava.

Volvemos a parar unos segundos en el avituallamiento antes de encarar la bajada… con precaución. Había tramos en obras con su respectiva arenilla suelta a parte de muchos otros tramos de asfalto roto y baches importantes. 

BONAIGUA Gran Fondo

Nota informativa: Al bajar siempre, SIEMPRE, usar gafas. Por muy sucias que las tengáis o por cualquier excusa que queráis poner pero usadlas. Y a qué viene esto? Pues porque en las rectas de este tramo donde volvías a coger mucha velocidad vi como un bicho el tamaño de una abeja se estampaba literalmente contra las mías. Dato que si no hubiese llevado se hubiese estampado directamente contra mi ojo izquierdo abierto. 

Con el golpe y el dolor me hubiese empezado a agitar y contando que bajaba a más de 60km/h la caída hubiese sido casi segura. No quiero imaginarme el final. 

Y dicho esto, continúo. Una vez descendida la primera parte del puerto, muy rápida, hasta llegar a Baqueira, toca pedalear. Pero voy fundido, apajarado, y llevamos viento en contra. Por el contrario Oli está pletórico y no para de empujar con fuerza. 
Cuando normalmente soy yo el rodador que por mi estatura y palanca de pierna me encuentro mejor moviendo vatios (y la paella de 53 que llevo por plato) ahora soy yo el koala que va enganchado a su rueda y rezando por no descolgarme porque no podría volver a pillarlo. 

BONAIGUA Gran Fondo

Y así, con mis pintas, dando más pena que gloria, llegamos a Vielha entrando a meta juntos con un tiempo de 3h53’ (3h48’ de pedaleo, apenas 5min perdidos en avituallamientos) después de haberme llevado a rueda los últimos ocho kilómetros. 

Sé que no hay clasificaciones y no quedará reflejado como tal en ningún sitio pero lo que me dejó realmente sorprendido es que entramos con el cuarto mejor tiempo de la Medio Fondo, a apenas veinte minutos del primero. 

Para el poco tiempo que tengo últimamente para entrenar y haciendo una o, con muchas suerte, dos salidas a la semana estoy más que satisfecho con el tiempo conseguido. 

Soy y seré EED (El Eterno Dominguero)

SALUD Y PEDALES.

Etiquetas: